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sábado, 31 de diciembre de 2011

Sansilvestre de Torrelavega.



Aquí empezó todo:

Agonizaba el año 2011 y ,de buenas a primeras, se me ocurrió correr esta carrera de poco màs de 5 km sin sospechar entonces que era la primera de muchas.
Tal vez fuera la súper marca que logré (21min 47 segundos para una distancia de 5200metros) o el ambientado que había, o la sensación de victoria que sentí al quedar delante de muchos conocidos que llevaban varios años corriendo, pero la verdad es que aquel día descubrí una afición que me tiene enganchado hasta el día de hoy y creo que para siempre.

Al llegar al lugar de la salida me encontré con mi amiga Irene  que luego ganaría la carrera y con varios otros pros. Irene me propuso que calentara con ellos y así lo hice.
Me encantó el buen ambiente que había en ese grupo, y así entre bromas, hicimos un calentamiento que a la postre resultó más largó que la carrera en sí.

A la hora de la salida Irene me convenció para que me pusiera en primera línea con ellos y, aunque en un principio me daba vergüenza, accedí.
De repente dan el pistoletazo y ahí que salgo yo como un tiro, más que nada para no ser atropellado por el pelóton que tenía detrás.

Así pasa la primera vuelta de un total de cuatro y yo como sí nada, aguantando en el grupo de cabeza.
En la segunda vuelta ya empiezo a descolgarme de los primeros, pero hago de tripas corazón y aprieto pensando que sólo eran tres vueltas al circuito.

En la tercera vuelta pierdo todo el fuelle que me quedaba y veo que me adelanta mucha gente, incluso pienso en la retirada al enterarme de que en realidad son cuatro vueltas, realmente no puedo más y tengo la sensación de ir realmente lento, pero decido tirar de orgullo y terminar aunque sea reptando.

Al darme cuenta de que queda poco me entran unas fuerzas de no sé dónde y consigo hacer un fuerte sprint de unos trescientos metros, recuperando varios puestos otra vez.

Debí de ir realmente deprisa al principio, porque al final marqué un tiempo que a día de hoy, tras años de entrenamiento, me sería difícil de superar. Pero lo más importante es que había descubierto una afición que me hace sentir realmente bien.

La siguiente carrera ya sería una media maratón dos meses después, pero esta historia merece un capítulo aparte.

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